La Historia de las Termas de Longroiva
Las aguas termales de Longroiva deben ser conocidas desde los tiempos prehistóricos. Los arqueólogos, desde hace tiempo, vienen reconociendo en estancias acuáticas medicinales vestigios de su aprovechamiento por el hombre prehistórico. El poblamiento de esta región hecho desde el Paleolítico nos lleva a pensar que estas aguas no habrán pasado desapercibidas a esos remotos habitantes.
Con más certeza, tenemos que aceptar que estas aguas eran ya conocidas de los romanos, que ocuparon el territorio vecino del castro de Longobriga, durante cientos de años, y allí realizaron sistemáticamente prospecciones para identificar los yacimientos mineros y de las aguas medicinales. La Leyenda de la Estatua del Baño de Longrovia, puede testimoniar el hallazgo en este lugar de una estatuilla romana consagrada a la diosa de la Salud, como era habitual ocurrir con aquellos colonizadores.
En los primeros reinados, las termas de Longroiva fueron pertenecientes a la Orden de los Templarios, pasando en el tiempo de D. Dinis, después de la extinción, a la Orden de Cristo. Los baños estaban ligados al culto a la Señora del Torrón, patrona de Longroiva. La capilla de la Señora del Torrão se sitúa en el lugar donde los Templarios abrieron el primer templo cristiano, en torno al cual establecieron su necrópolis.
El balneario medieval debía ser una continuación del romano. Era muy simple, componiéndose de dos tanques, uno destinado a los hombres y el otro a las mujeres, protegidos por una especie de cabal, con la cubierta de colmo. Este sistema se mantuvo hasta casi a finales del s. XIX, cuando la Cámara construyó el edificio termal.
Reza la historia que la Reina Santa Isabel, venida de Aragón para casarse con D. Dinis en Trancoso, habrá pasado en la vieja carretera romana, cerca de Longroiva, bañándose aquí. No hay prueba de que sea verdadera esta afirmación. No olvidemos también que en la Edad Media los baños privados eran tomados en tinas. Dada la alta categoría de la Princesa, no es de aceptar que se bañase en el tanque público. Sin embargo, no podemos rechazar la posibilidad de bañarse en una tina con agua sulfurosa de Longroiva.
1810: Debido a la degradación de la estructura, la junta de la parroquia, a costa de limosnas dadas a la Señora del Torrão, reconstruyó el establecimiento termal de tipo romano, con los dos tanques, uno para hombres y otro para mujeres. Los bañistas se sentaban en el interior en bancos de piedra. Con el rendimiento de los baños, que eran pagados por los de fuera del lugar y siempre gratuitos para los longroivenses, se hacía la fiesta a la Señora del Torrão, el 8 de septiembre.
1815: el Dr. Manuel José Lobão, corregidor de Trancoso y natural de la entonces anexa de Longroiva, la actual parroquia de Santa Comba, (hoy en el municipio de Vila Nova de Foz Côa), mandó reparar los baños.
En el primer cuartel del s. En 1821, fueron las termas objeto de una memoria presentada a la Academia de las Ciencias (Memorias, tomo IV - 1821), por José Pinto Rebelo de Carvalho
1844-45: Magalhães y Vasconcelos, en la Revista Universal Lisbonense (tomo IV), publicó un artículo sobre Longroiva y sus aguas minerales, acompañado de una vista de la parte alta del pueblo y su castillo. Desde entonces, enciclopedias y estudios hídricos refieren las termas de Longroiva.
En el siglo XVIII, en el siglo XVIII, en el siglo XVIII, en el siglo XVIII, en el siglo XVIII, el Imperio Romano se convirtió en una de las más antiguas del mundo. . La gente de Longroiva trabajó gratuitamente en la obra, colaborando en el transporte de la piedra y en los trabajos de desalojo.
Más tarde, se realizaron obras de mejora del edificio y se encargó un proyecto para un inmueble capaz de resolver el del balneario. Al insigne investigador, Prof. El doctor Ramiro Valentim, de la Facultad de Medicina de Oporto y una de las mayores autoridades nacionales en la materia, se solicitó el estudio médico - experimental de las aguas de Longroiva a fin de evaluar sus reales posibilidades.
1970: El agua de las Termas de Longro, teniendo un uso que ya viene de muy lejos en el tiempo, fue con certeza blanco de varios análisis e investigaciones, sin embargo, de los estudios o informes disponibles, el análisis más antiguo data de 1970, efectuada por Silva y Almeida (1970).
2001: Tras el proceso presentado al instituto geológico y minero, con solicitud dirigida al Exmo. Señor Ministro de Economía, fechado el 5 de julio de 2001, fue nombrada por primera vez Concesionario del agua mineral Natural de Longroiva, el Ayuntamiento de Meda.
En funcionamiento desde 2001 en el estudio médico-hidrológica para la validación de las vocaciones terapéuticos, el Comité de Evaluación Técnica propuso el reconocimiento de las indicaciones terapéuticas de las aguas minerales de spa Longroiva para enfermedades del sistema respiratorio y reumáticas y musculoesqueléticas, en de conformidad con la letra g) del apartado. Apartado 5 del artículo 29. Del Decreto-Ley nº 142/2004, de 11 de junio, y la Dirección General de Salud procedió a su reconocimiento.
Después de varias obras de ampliación y remodelación del balneario, en 2001 las Termas de Longroiva inician un nuevo capítulo en su historia. El Ayuntamiento constituye la Empresa Municipal Aguas de Longroiva, Exploración y Gestión de aguas termales, EM - una empresa de capitales públicos, donde posee la totalidad del capital, 100% - a quien entregó la gestión del balneario termal. Manteniendo la concesión y controlando la gestión.
2011: Más de doscientos años pasados desde la construcción en el primer balneario, las Termas de Longroiva rejuvenecen ...
Que mezcla modernidad con la tradición termal, Longroiva Spa tienen ahora la estación actual, una de las mayores y mejores estaciones portuguesas. Esta obra marcará las Termas de Longroiva y el Termalismo Nacional.
En el caso de las Termas de Longrotiva, se concede a Natura Emprendimiento SA, que, pensando en la consecución de su objetivo, dinamizar y hacer evolucionar las Termas de Longroiva, inició la construcción del Hotel rural de las Termas de Longroiva.